Carta para un sacerdote

Señora Flor de Aguilera del Grupo Carta para un Sacerdote de la Fundación Padre Jaime:

Cordial saludo. Muy querida Flor, en primer lugar, me disculpo por la demora de mi respuesta, en estos momentos me encuentro en un lugar de misión y la comunicación es difícil en este lugar. Sin embargo, hago el esfuerzo por responder a tu carta.

Aunque no hemos tenido la oportunidad de conocernos personalmente, te agradezco a ti, y al Grupo Carta para un Sacerdote de la Fundación Padre Jaime por la sentida carta que me has regalado. He sentido en cada una de las palabras escritas, las más sinceras manifestaciones de los buenos deseos y oración que realizas por mi vocación sacerdotal.

Espero que te encuentres muy bien en este tiempo tan difícil que vive el mundo entero y  deseo lo mejor para ti y tus seres queridos. De igual manera, te continúo motivando a ti y al Grupo y a  la Fundación Padre Jaime para que sigan con esta labor maravillosa de seguir apoyando con su ayuda económica y oración a los futuros  sacerdotes y a los que ya nos encontramos ejerciendo este ministerio.

Que el Dios Resucitado los bendiga y les continúe dando la fortaleza y perseverancia suficiente para seguir cumpliendo como discípulos y discípulas de Cristo esta grande labor. Les escribe con cariño,  P. José Hernando Gómez, sdb,  beneficiario de la Fundación Padre Jaime, Condoto, Chocó.